miércoles, 21 de agosto de 2024

Reconstrucción

En tiempos de Samper, Don Hernán Echavarría Olózaga se quejaba de que Colombia tuviera un granuja en la jefatura del Estado. Hoy nos desgobierna alguien de peor calaña, que con su talante zafio, sus peroratas ofensivas y sus comportamientos desatinados demuestra su indignidad respecto de la alta investidura que ostenta.

El vulgar papelón de Panamá da cuenta de que no se respeta a sí mismo, ni a su familia, ni a la hospitalidad del país vecino, ni muchísimo menos a la gente de bien de nuestra patria.

Sus discursos destilan odio, resentimiento, envidia, agresividad, maledicencia y, en fin, una actitud claramente hostil llamada a azuzar al pueblo contra los que él ha graduado de enemigos. Su verbo ponzoñoso convoca a la violencia, no obstante sus mendaces llamados dizque a una paz total.

Transcurrida ya la mitad de su mandato constitucional, lo que tiene para mostrar es una obra de demolición de la institucionalidad que a lo largo de años fatigosamente hemos organizado.

Como ya va cuesta abajo, empiezan ahora a agitarse posibles candidaturas para las elecciones que ojalá no se frustren en 2026.

Como dijo alguna vez Carlos lleras Restrepo, la consigna es "al agua, patos". Puede haber muchos buenos aspirantes a reemplazar al que para nuestro infortunio hoy nos desgobierna. Ya suenan algunos, pero hay que darle tiempo al tiempo para que otros se manifiesten.

No sobra hacer algunas advertencias al respecto.

En primer lugar, quien aspire a ganar el favor ciudadano debe exhibir respetabilidad, que es condición sine que non para un buen gobierno. No basta con adquirir el poder, pues si éste no se reviste de autoridad moral sus empeños serán irrisorios. Un dirigente del que los súbditos se burlen, como sucede con el actual inquilino de la Casa de Nariño, no puede obtener los apoyos que se requieren para una gestión exitosa.

En segundo lugar, hay que convocar a las fuerzas vivas de la nación para reconstruir lo que en estos dos fatídicos años se ha desquiciado, comenzando con la austeridad las finanzas públicas y su aplicación a las más apremiantes necesidades populares.

Esa convocatoria tiene que partir de la base del buen entendimiento entre el sector público y el privado, que es el secreto del éxito de las democracias occidentales. La libre iniciativa individual adecuadamente regulada por el Estado muestra que es la fórmula más adecuada para la promoción del bien común.

En tercer lugar, la reconstrucción del tejido comunitario conlleva un denodado esfuerzo para superar la profunda crisis moral que nos agobia. No basta con declararse enemigo de la corrupción, sino actuar como tal. Padecemos un desgobierno que clama contra los corruptos, pero los acoge benévolamente en su seno. ¿Qué decir de quien dice representarnos ante la FAO, por ejemplo?

En cuarto lugar, hay que superar la dicotomía entre derecha e izquierda, que parece reproducir la de Escila y Caribdis de la mitología clásica.  Mejorar las condiciones de vida de la población es un imperativo ineludible, pero ello no se logra multiplicando dádivas a la bartola ni hostigando a los emprendedores, sino con un esfuerzo pragmático que estimule a éstos y beneficie a los menesterosos.

Last, but not least, los aspirantes deben prestar oídos a las voces sensatas que alertan sobre la necesidad de ponerse de acuerdo en las fórmulas de selección de los más opcionados, de modo que puedan presentar un frente común capaz de superar las asechanzas del demonio que nos desgobierna y aspira a perpetuarse en el poder, así sea en cuerpo ajeno y haciendo gala de todas las triquiñuelas de que es capaz.

No olvidemos que Colombia vive las horas más críticas de su historia. De la buena voluntad y el buen sentido de sus dirigentes depende que transite por buen camino en los tiempos venideros.


miércoles, 14 de agosto de 2024

Poderes ocultos

David Placer ha publicado dos importantes libros sobre las influencias ocultistas en el régimen venezolano: "Los Brujos de Chávez" y "El Dictador y sus Demonios". Ambos se consiguen en Amazon y el primero de ellos se puede descargar gratuitamente en (99+) Los Brujos de Chávez | Ana Gonzalez - Academia.edu.

"Los Brujos de Chávez" es fruto de una detallada investigación acerca de los nexos del finado dictador con el esoterismo, los cuáles se iniciaron a través de prácticas espiritistas que lo convencieron de que se contactaba con el Libertador Simón Bolívar y un antepasado al que llamaban Maisanta. 

Cristina Marksman, hermana de una amante suya, estaba bien dotada de poderes paranormales y a lo largo de varios años fue su confidente y consejera. Ella le auguró la prisión, la conquista del poder político y la muerte precoz. Cuando logró la elección presidencial se afilió a la masonería y, luego, a raíz de sus estrechas relaciones con el régimen cubano, le abrió las puertas a la santería. Fidel Castro aprovechó el talante supersticioso de Chávez para ponerlo en manos de los babalawos o santeros que invadieron como plaga de langostas a Venezuela para penetrar todos los estratos sociales y servir de espías del tirano que imperaba en la isla prisión.

El libro se lee de corrido. Es fascinante y, en algunos de sus apartes, aterrador. La santería. bien sea la cubana o la más vinculada con sus antecedentes africanos, se impuso en Miraflores, la residencia presidencial, y se extendió hasta el pueblo llano. Hay un capítulo especialmente crudo sobre el tráfico de restos humanos que se utilizan para los rituales de la palería, así como un relato estremecedor sobre el ritual que practicó Chávez en torno de los restos de Bolívar, dizque para ser poseído por su espíritu. Bien se sabe que Chávez mantenía en su comedor y en reuniones que celebraba una silla vacía para que la ocupara el Libertador.

Toda esa hechicería no pudo impedir que lo invadiera el cáncer. Doblegado por éste, pidió los auxilios de la religión católica y al parecer murió invocando a Nuestro Señor Jesucristo, no sin antes haber pedido su protección en La Grita, como también la de Nuestra Señora de Coromoto, patrona de Venezuela.

Recuerdo que militares venezolanos que lo acompañaron a la Cumbre Iberoamericana que se celebró en Santiago contaron que hizo comprar cantidades de vino para llenar la bañera del recinto en que se hospedaba y sumergirse en ella. No sé si esa práctica tenía que ver con sus supersticiones o hacía parte de su extravagancia.

El caso de Maduro es quizás peor. En "El Dictador y sus Demonios", Placer cuenta que, fuera de sus prácticas espiritistas y santeras, se hizo seguidor de Sathia Sai Baba, un famoso gurú indio que se creía un dios hacedor de milagros (vid. Sathya Sai Baba - Wikipedia, la enciclopedia libre). Se habla de las fortunas que ha dilapidado pagando brujos en Cuba y de las ceremonias de hechicería que se realizan en la residencia presidencial (vid. El dictador y sus demonios: La secta de Nicolás Maduro que secuestró a Venezuela by David Placer | Goodreads).

En la presentación del libro se dice:

" Maduro, de la mano de su mujer, la supersticiosa Cilia Flores, quería tocar las puertas del cielo, pero terminó construyendo en Venezuela el peor de los infiernos. El devoto del gurú indio Sai Baba se rodeó de ministros sectarios y fanáticos que tejieron una red de espionaje invisible e inviolable, construyeron las más terroríficas mazmorras y dirigen una red de exterminio para aniquilar a opositores y a chavistas disidentes con total impunidad."

En Venezuela reina un demonio. Es un país dominado por el Príncipe de las Tinieblas, lo mismo que Haití, Nicaragua y, por supuesto, Cuba.

Reitero que el nuestro no está lejos de caer bajo sus garras. La pareja que nos desgobierna realizó poco antes del 7 de agosto de 2022 en un parque bogotano una estrafalaria "posesión espiritual" en la que se practicaron rituales dizque propios de nuestros ancestros indígenas y afrodescendientes, pero probablemente  impregnados de hechicería y quizás de satanismo.

Como la nuestra ya no es una Iglesia militante, sino claudicante, no alza su voz para advertir los riesgos que para la salud espiritual de la población acarrean esas oscuras tendencias.

Insisto en que debemos orar mucho por la salvación de Colombia, que va por un despeñadero, guiada por un personaje oscuro como el que más.

miércoles, 7 de agosto de 2024

¡Muera el mal gobierno!

Los comuneros se alzaron en la Nueva Granada bajo la consigna de "¡Viva el rey y muera el mal gobierno" (vid. Heroínas: Manuela Beltrán heroína de la independencia de Colombia (heroinas.net).

Ya no tenemos rey, pero sufrimos el oprobio de un desgobierno que al promediar su mandato ha abundado en desaciertos y, para peor, ha sumido en hondas y graves preocupaciones a nuestros compatriotas por lo que podría acontecernos en el inmediato porvenir, habida consideración de lo que sucede en la vecina Venezuela.

¿Veremos el final de este deplorable mandato el 7 de agosto de 2026 o la caterva que lo rodea insistirá en prolongarlo, así sea en cabeza ajena?

Conviene recordar que quien ocupa hoy en nuestro país la jefatura del Estado lo hace violando el artículo 197 de la Constitución Política, que prohíbe que sea elegido para ejercerla a quienes hayan sido condenados en cualquier época por sentencia judicial, a pena privativa de la libertad, excepto por delitos políticos o culposos. 

El que nos desgobierna fue, en efecto, condenado por la justicia penal militar entonces vigente en el país, entre otros por el delito de porte ilegal de armas. Es un hecho notorio que él mismo ha reconocido que pagó cárcel por ello, pero cuando alguien intentó impedir por la vía judicial que se lo eligiera por votación popular para un cargo público, no logró ´probarlo porque había desaparecido en el expediente respectivo el original de la sentencia condenatoria. Ello sucedió probablemente por obra de una mano criminal que cometió el delito de falsedad en documento público. La administración de justicia, al parecer, no lo investigó y es por ello que no se pudo lograr la nulidad de la elección.

Estamos desgobernados por alguien que tiene antecedentes criminales de los que se ufana, pues los justifica alegando que luchaba contra un régimen tiránico. ¿Lo era el de Julio César Turbay Ayala, el de Belisario Betancur Cuartas o el de Virgilio Barco Vargas?

Es un personaje que se formó en la ilegalidad y es muy poco el respeto que a pesar del perdón que a sus conmilitones del M-19 les otorgó el Congreso ha mostrado en torno de nuestras instituciones. No se siente a gusto como gobernante con el sistema de pesos y contrapesas con que lo limita la Constitución Política y no pocas de sus acciones tendientes a socavarlo parecen copiadas de las que ha utilizado Putin para instaurar un régimen dictatorial en Rusia, según lo reseñé en mi más reciente artículo, o, para no ir tan lejos, sugieren cierta similitud con las trapisondas del chavismo en Venezuela.

Ahí residen los profundos temores que a diario se ponen de manifiesto en los medios, sobre todo cuando se considera la posibilidad de que influya decisivamente en las elecciones de nuevos magistrados de la Corte Constitucional o de nuevo Procurador General de la Nación, que son órganos que todavía parecen dar cuenta del vigor de nuestra institucionalidad.

No sabemos si el Congreso logrará superar la tentación de la suculenta "mermelada" con la que ya se sabe que se ha comprado a influyentes miembros suyos, pues si bien ha frenado algunas de sus inquietantes iniciativas, no se advierte el avance del juicio político que debería adelantarse por la ya indiscutible violación de lo dispuesto por el artículo 109 de la Constitución Política,

El flamante embajador ante la FAO, en un impromptus, hizo saber que a la campaña entraron ilegalmente $ 15.000.000.000, lo cual corroboró un exmagistrado venezolano afirmando que el dinero provino del "Cártel de los Soles" que impera en el vecino país (vid. https://www.youtube.com/watch?v=wWfqNPw-uog). ¿Por qué esto no ha sido objeto, como coloquialmente se dice, de "exhaustiva investigación"?

En mi más reciente artículo escribí que Colombia no es todavía un Narcoestado, pero va en camino de serlo siguiendo los pasos de Venezuela. No lo es, porque quedan vestigios de institucionalidad independiente y responsable. Pero corre peligro de serlo si los frenos institucionales se deterioran y continúa extendiéndose a lo largo y ancho del territorio el control que ya ejercen desaforadamente las organizaciones criminales que el que nos desgobierna ha dejado que obren a sus anchas so pretexto de una inconcebible "paz total".

Si a ello se agregan el debilitamiento, la desmoralización y la humillación a que viene sometiendo a la fuerza pública, así como la defensa contra toda evidencia ya declarada por la justicia penal de la ominosa Primera Línea, vaya uno a saber si reforzada por los millones que se ofrecen a cien mil jóvenes dizque para que no delincan, el panorama se torna más oscuro. ¿No son cien mil los integrantes de los feroces colectivos chavistas que oprimen a la población venezolana?

No cabe duda de que padecemos un mal gobierno. Quiera Dios que no pase del 7 de agosto de 2026.


lunes, 5 de agosto de 2024

Regímenes mafiosos: ¿agentes demoníacos?

Después de publicar mi reciente escrito sobre el gangsterismo político, encontré en Amazon un libro de palpitante actualidad sobre el dominio que las mafias ejercen sobre Rusia. Su título es "Putin's Mafia State: A Story of Corruption, Control, and the Failure of Democracy in Russia". Su autor: Leonid Nevzlin (vid. https://www.amazon.com/dp/B0D3F1K1QK/ref=docs-os-doi_0). 

No dudé en descargarlo inmediatamente a través de Kindle y abordar cuanto antes su lectura, que ofrece un panorama desolador del régimen que domina en tan significativo país, del que depende hoy no sólo la paz mundial, sino el futuro mismo de la humanidad.

Los datos del libro fueron aportados por personas residentes en Rusia que no pueden dar a conocer sus identidades porque temen justificadamente por sus vidas. El autor reside en Israel. Hubo de renunciar a la ciudadanía rusa debido a su oposición a Putin (vid. Nevzlin, Leonid Borisovich (jewishvirtuallibrary.org).

La descripción de un régimen mafioso como el que impera en Rusia y otras latitudes muy cercanas a nuestro país es desoladora. La Constitución y la institucionalidad en general son de fachada. Hay unas reglas no escritas y una organización real que dependen de una camarilla que ha capturado el poder público para la satisfacción de sus propios intereses centrados básicamente en el enriquecimiento personal. Ni la administración de justicia ni la fuerza pública son confiables, pues les toca someterse a los dictados gubernamentales. Ningún derecho les es oponible. Quien los desafíe paga con su vida.

Lo que estamos viendo que sucede en Venezuela es un pálido remedo de la realidad rusa, pero muestra a lo que se llega cuando un poder desaforado se salta todas las talanqueras con que la juridicidad trata en vano de sujetarlo. 

Esto no es nuevo en lo que José Martí llamaba Nuestra América. Hace relativamente poco se reeditó entre nosotros el libro de Germán Arciniegas titulado "Entre la Libertad y el Miedo", que describe cómo las dictaduras del entorno que nos rodea competían en cinismo y brutalidad, tal como hoy se sufre en Venezuela, en Nicaragua y ha quedado como herencia de más de medio siglo de castrismo en Cuba.

Un libro muy interesante, aunque algo discutible en lo que toca con algunas de sus hipótesis, enseña que a Fidel Castro ya desde su época de estudiante universitario se lo consideraba en Cuba como un gángster, lo cual no era extraño en el enrarecido escenario político de la actual isla prisión. Su autor, Servando González, lo acusa de haber participado en el asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, hecho luctuoso que nos ha acarreado males sin cuento (vid. (99) La CIA, Fidel Castro, el Bogotazo y el Nuevo Orden Mundial | Andy Chavez - Academia.edu¡EL BOGOTAZO! "Fidel Castró mató a Gaitán el 9 de abril", escritor Servando Gonzáles. (youtube.com).

Arciniegas nos ofrece un capítulo extravagante sobre un dictador salvadoreño que practicaba la brujería y gobernaba según los mensajes que descifraba de unos frasquitos que mantenía en la azotea de su residencia presidencial. El satanismo está entronizado hoy en Nicaragua, que gime bajo la nefasta influencia de Rosario Murillo, de le que se dice que es una bruja poderosísima (vid. https://www.youtube.com/watch?v=Kq7FWZBlq-E). Y si de brujería hablamos, hay muchos rumores sobre su influencia no sólo en la Venezuela de hoy, sino en nuestro propio país. Lo de Haití es capítulo aparte. Nadie duda de que está bajo las garras de potencias infernales.

Venezuela es hoy a las claras un Narcoestado. Colombia no lo es todavía, pero va camino de serlo bajo el mando de seres oscuros como el que para nuestro infortunio nos desgobierna y su secuaz en la vicepresidencia.

Como creo firmemente en Dios, pero también en la existencia y el poder del Maligno, no dudo del control que ejerce sobre los regímenes mafiosos a los que hago referencia. Pese a los escépticos y descreídos, considero que estamos hoy en el escenario de una batalla cósmica entre las fuerzas del bien y las potencias infernales que luchan por la sujeción e incluso la destrucción de la humanidad.

Lo dijo San Pablo VI: "A través de alguna grieta el humo de Satanás ha entrado en el templo de Dios" (vid. STAT VERITAS: Pablo VI: “A través de alguna grieta ha entrado, el humo de Satanás en el templo de Dios”. (statveritasblog.blogspot.com)

Si hasta allá alcanzan sus tentáculos, ¿qué decir de los gobiernos?